Según el último Informe sobre Coyuntura Económica de L'Hospitalet y el Baix Llobregat, al finalizar 2022 se ha vuelto a las cifras de finales de junio, con 46.682 personas en situación de desempleo en nuestro territorio, con poco más de 100 desempleados más que a finales de junio cuando empezaba la campaña de verano.Estas cifras, muy buenas comparadas con el inicio de año, pueden enmascarar el fin de las restricciones sanitarias provocadas por el Covid-19 y por el cambio normativo que hace que los contratos de trabajo fijos-discontinuos no computen como personas en situación de desempleo aunque no estén trabajando.
Si comparamos la situación municipio a municipio, vemos que en los últimos 12 meses solo dos poblaciones han visto aumentar su población en situación de desempleo: Cervelló (6) y Corbera de Llobregat (2), aunque con unas cifras muy reducidas. El resto ha visto disminuir su número de personas en situación de desempleo. Las poblaciones más beneficiadas por esta disminución de paro, en términos relativos, han sido: Castellví de Rosanes (-17,3%), Abrera (-13,2%) y Collbató (-12,8%). En términos absolutos, las que más han disminuido dicha cifra corresponden a: L'Hospitalet de Llobregat (-832), Sant Boi de Llobregat (-373) y Viladecans (-204).
La economía catalana modera su crecimientoEl crecimiento de la economía catalana continúa siendo significativo, de un 4,0%, en el tercer trimestre, a pesar de que modera el dinamismo respecto a la primera mitad del año. Los servicios crecen un 6,0% interanual, con un dinamismo notable de los servicios empresariales y tecnológicos, y también con una mejora, cada vez menos vigorosa, en el turismo. La construcción mantiene el crecimiento (2,7%), pero con perspectivas menos favorables por la subida de los costes financieros. La industria estabiliza el ritmo de descenso (-2,4%), con una evolución bastante desigual por ramas, donde el dinamismo de los productos farmacéuticos contrasta con la debilidad de la industria textil y de la metalurgia. Finalmente, el sector agrario es el que presenta una bajada más marcada (-15,0%), muy afectado por el encarecimiento de costes intermedios (energía, piensos, fertilizantes...) y por la caída de la producción agrícola por la climatología adversa. Las exportaciones de bienes catalanes muestran una desaceleración, con un crecimiento del 17,0% anual en términos nominales en el periodo enero-agosto (21,5% el 2021), si bien buena parte del crecimiento se derivaría del aumento de precios de los bienes.
Pueden consultar el informe completo:
INFORME SOBRE LA COYUNTURA ECONÓMICA 4º TRIMESTRE 2022